Configura tu privacidad: Ajusta las configuraciones de privacidad para controlar quién puede ver tus publicaciones y acceder a tu información personal.

Revisa tus publicaciones: Antes de compartir cualquier contenido, reflexiona sobre su impacto y asegúrate de no divulgar información sensible.

Desconfía de enlaces sospechosos: Evita hacer clic en enlaces de origen desconocido, ya que podrían llevar a sitios fraudulentos.

Perfil privado: Mantén tu perfil en modo privado para que solo tus seguidores aprobados puedan ver tus publicaciones.

Verificación en dos pasos: Habilita la autenticación de dos factores para añadir una capa extra de seguridad a tu cuenta.

Sé consciente de lo que compartes: Evita publicar fotos que puedan revelar tu ubicación o detalles personales.

Protege tus tweets: Configura tu cuenta para que solo tus seguidores puedan ver tus tweets.

Reporta contenido inapropiado: No dudes en denunciar cuentas o publicaciones que consideres abusivas o peligrosas.

Utiliza contraseñas fuertes: Asegúrate de tener una contraseña segura y única para tu cuenta de Twitter.

Mantén la profesionalidad: Comparte contenido relevante y profesional, evitando información demasiado personal.

Cuidado con las conexiones: Acepta solicitudes de conexión solo de personas que conoces o que tienen una relación profesional contigo.

Actualiza tu perfil con precaución: Ten cuidado al actualizar tu experiencia laboral o habilidades, especialmente si aún no has comunicado ciertos cambios a tu empleador actual.

Controla los comentarios: Utiliza las opciones de moderación para filtrar comentarios inapropiados o negativos en tus videos.

Privacidad en los videos:  Ajusta la configuración de privacidad para que solo tus amigos puedan ver tus videos.

Desconfía de los desafíos: Evita participar en desafíos virales que puedan ser peligrosos o comprometer tu seguridad.